Desde hace años, cuando de muy joven visitaba casi cada viernes la antigua y ya lamentablemente cerrada Gabinoteca, soy fiel seguidora de la buena mano en la cocina de Nino Redruello. Junto a su hermano, pertenecen a una cuarta generación de hosteleros que, apoyados por socios relevantes como Patxi Zumárraga, han conseguido perdurar durante años sus restaurantes de toda la vida y hacerlos evolucionar acorde con las generaciones. Propietarios de grandes clásicos como La Ancha, Las Tortillas de Gabino y hace pocos años, Fismuler, algunos de ellos y especialmente este último, son de mis templos gastronómicos más visitados de Madrid.

Durante la pandemia, unos de los primeros que se lanzaron al delivery fueron precisamente ellos, arriesgando con acierto y trasladando su buen hacer en la cocina con su siempre tradición bien entendida, a una propuesta de envío a domicilio sin artificios y respetando el producto de algunos de sus grandes clásicos.

Escalope Armando, a domicilio

Así nació Escalope Armando, su plataforma de envío a domicilio en Madrid y Barcelona de platos tan reconocidos como sus tomates, la ensaladilla, la tortilla trufada y por supuesto, su reconocido filete XXL, todo ellos buenos viajeros de sus comedores a nuestras casas, que, como sabéis, no siempre es fácil que un producto llegue en su punto a nuestro salón.

Y ahora, han vuelto a innovar, proponiendo una caja que contiene un original menú para dos y todo lo necesario para hacer en casa el finísimo escalope Armando. De esta forma, Nino ofrece todo su conocimiento y los secretos de la elaboración de su producto más afamado, para que de una forma sencilla podamos elaborarlo en casa, y además, divertirnos.

El producto llega con un packaging muy cualitativo. Una caja de madera y enviado en frío que contiene un menú para dos para los que se divierten trasteando en la cocina o, sencillamente, les encanta comer.

Esta caja para locos del filete empanado tiene tanto la materia prima como los utensilios para elaborarlo. Dos filetes crudos de tapa de ternera blanca nacional envasados al vacío que llegan con una espalmadera de hierro de 1,6 kg hecha a mano y diseñada ad hoc por Nino para “aplastar” el filete y dejarlo súper finito hasta conseguir así el tamaño deseado, uno de los pasos más importantes en su elaboración.

Además, lo acompaña el pan rallado, elaborado artesanalmente por el maestro secadero de La Ancha que lo prepara diariamente la mezcla de panes de pistola y baguette, dos huevos cocinados a baja temperatura para verter encima y un tarrito con aceite de trufa negra para embadurnar el escalope una vez frito. Igualmente, se acompaña de otros entrantes míticos de La Ancha: croquetas de jamón ibérico sin freír, un tarro de boletus frescos confitados y embotados en conserva, un tomate Rosa de Barbastro, una lata de Aceite de Oliva Virgen Extra variedad Arbequina y, para rematar, su inigualable tarta de queso de Fismuler, para mí, la mejor de Madrid.

Además, el reparto llega a toda España peninsular junto a una tarjeta explicativa y un código QR del que se descarga el vídeo del cocinero compartiendo sus instrucciones, se adquiere a través de la web Escalope Armando y su precio es 75€ y 85€ (esta última incluye una botella de vino Marqués de Riscal Tinto Reserva 2015). La antelación para realizar el pedido es de un mínimo de tres días. Asimismo, de cada caja vendida ellos destinarán 2€ a la Asociación de Hemofilia de la Comunidad de Madrid, por lo que encima, ¡es regalo solidario!

Un último apunte: la espalmadera va personalizada con las iniciales del cliente, por lo que, si eres un friki de las pijadas de la cocina como yo, el paquete te hará el doble de ilusión.

Mapi Hermida, La Gastrónoma
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